mágico, mágico, mágico

Mis cabañas estaban rodeadas de naturaleza exuberante, creando un ambiente que te hacía sentir en un verdadero refugio. El desayuno era un festín, y disfrutarlo con esas vistas increíbles al amanecer era simplemente un sueño. Las noches en la terraza con amigos, bajo un manto de estrellas, hicieron que cada momento valiera la pena.

lo recomendaría 😊❤️

La experiencia fue simplemente decepcionante. No hicieron la cama en tres noches, y después de caminar tanto, esperaba un regalo de bienvenida. La falta de agua constante fue inaceptable, y esos insectos en mi habitación, ¡ni hablar! Casi escribo una buena reseña, pero no podía ignorar estos detalles tan triviales y ridículos. Nunca volveré.

Las cabañas son agradables y limpias, además de tener vistas hermosas al mar. El desayuno es delicioso y el personal es bastante amable, lo que suma a la experiencia. Sin embargo, el acceso es complicado, con un camino largo que puede ser agotador, y la falta de agua constante fue una gran molestia durante nuestra estadía. Aun así, la ubicación alejada permite un buen descanso, aunque estar tan lejos del centro puede no ser ideal para todos.

Los paisajes desde la habitación son simplemente espectaculares, una vista que perdura en la memoria. Aunque el camino hasta llegar es un poco agotador, realmente vale la pena por la tranquilidad que se respira. Además, la calidad y limpieza de las habitaciones contribuyen a una estancia placentera.

Las cabañas son cómodas y las vistas son espectaculares. La conexión Wi-Fi es mala.

el bungalow tenía unas vistas espectaculares, especialmente al amanecer. el desayuno ofrecía opciones deliciosas que hicieron mi día más alegre.

el aire acondicionado no funcionaba bien.

Las vistas desde el bungalow son realmente impresionantes, ofreciendo un buen espectáculo natural. Además, el ambiente rústico de las cabañas añade un toque único a la experiencia, haciendo que se sienta más conectado con la naturaleza.

El acceso al hotel es un desafío, con un camino complicado que te deja sudando y boqueando después de una caminata de 20 minutos, especialmente bajo el calor sofocante. La falta de limpieza se hace evidente, con sábanas que no parecen frescas e insectos que aparecen debido a las rendijas en las paredes. Para colmo, el hecho de que no cuenten con servicio de agua constante es una molestia, limitando las horas de uso y afectando la comodidad general.

Las vistas desde el bungalow son impresionantes, perfectas para un amanecer. El camino hacia el hotel es complicado y agotador, especialmente con las temperaturas altas.

Las cabañas son como pequeños refugios en la jungla, ideales para relajarte mientras disfrutas de un café en la terraza, viendo el amanecer. El restaurante ofrece platos tailandeses que son como un abrazo en forma de comida, con un curry que te hará bailar de alegría.

Acceso complicado

Experiencia mixta en un lugar espectacular

Las vistas desde el bungalow son impresionantes y el ambiente es ideal para descansar. Sin embargo, la falta de agua fue un gran inconveniente y el camino hacia la habitación puede ser agotador. Asegúrate de coordinar el transporte desde el puerto con anticipación para un mejor acceso.